Eres un joven entrenador que lleva bastante tiempo en su viaje por la región de Jotho, gracias a los contactos del profesor Oak se te ha permitido entrar a las zonas circundantes al monte plateado. Estás consciente del peligro que tendrás que afrontar de ahora en adelante debido a lo exageradamente fuertes que son los Pokémon que se encuentran tanto dentro de la montaña como del sendero repleto de hierba alta, que será el primer lugar por el cual tendrás que atravesar. Por esto mismo has preparado meticulosamente a tu equipo Pokémon para hacer frente a lo que se te aparezca.
Apenas cruzas algunos metros del camino hacia el monte notas un pequeño saliente entre los densos árboles hacia el norte de la ruta. La curiosidad te invade y te acercas a revisar. Te haz encontrado con la sorpresa de que parece haber una fuente de luz escondida entre la frondosidad del bosque, y no sólo eso, viendo mejor te percatas que hay una pequeña cabaña que es de dónde proviene ese resplandor.
Sin pensar dos veces te desvías del camino hacia el monte y te adentras al bosque para investigar.
Una vez que llegar pretendes entrar, pero cuando tú mano está a punto de empujar la puerta de lo que más de cerca pudiste identificar cómo un escondrijo. El ambiente se vuelve sumamente pesado, tienes una fuerte sensación de que alguien te está observando fijamente, tan solo un instante después de que te percatases de que no estabas sólo escuchas pasos rápidos hacia tu dirección. Intentaste sacar una de tus Pokebolas lo más rápido que pudiste pero esa cosa te dio un golpe con una fuerza sobre humana antes de que tan si quiera te voltearas.
Una vez que estuviste en el suelo, aún recuperandote por el daño pudiste ver qué se trataba de un Pokémon, una bellossom, pero era demasiado diferente a los demás miembros de su especie, ella era alta y tenía una fisionomía humana, con brazos y piernas largas e incluso rasgos faciales además de una marcada cintura femenina y busto.
No sólo era extraña por su apariencia si no que te había dado un "mazazo" movimiento que su especie ni si quiera aprende.
¡Habías perturbado su hogar y estaba muy molesta!.
Antes de que pudieses reaccionar ella te puso a dormir con esporas somniferas, lo último que pudiste escuchar antes de perder el conocimiento fue una tenue risa femenina.
Cuando despertaste ella estaba parada en frente de ti, tocándose una de sus tetas mientras te miraba con intensiones lujuriosas, intentaste moverte pero fue en vano, ella había hechando raices en el suelo para que te fuera imposible escapar de su merced, de reojo pudiste ver tu mochila con tus Pokémon bolas apartada lejos de ambos, por si no estuvieras lo suficientemente indefenso ahora tampoco podías contar con tus amigos para ayudarte.
Inmediatamente después bellossom levanto su pierna y dejo caer su pie sobre tu cara, ella estaba presionando su planta contra tu nariz para asegurarse de que olieras su esencia, a pesar de lo humillante que era la situación, estabas disfrutando ser reducido a una alfombra por esta hermosa bellossom. Esto debido (además de su físico) a qué al ser un Pokémon flor todas las partes de su cuerpo olían bien, incluyendo sus pies. El pie sexy de esta chica olía cómo un campo de lavandas. Estando bajo su pie, por más increíble que parezca, comenzaste a sentir una devoción por ella, así que besaste su planta una y otra vez. Al notar esto, la bellossom te sonreía, quitó su pie de tu cara y se sentó en tu pecho para estar cara a cara contigo.
Ahora, de sus flores comenzó a soltar un extraño polvo, no se parecía a nada que ningún otro Pokémon de tipo planta o bicho pudiera crear o utilizar en ataques basados en la esparcion de polvos nocivos, cómo paralizador o polvo plata.
Lo instalaste. En cuanto entró a tu sistema, comenzaste a sentir un completo amor y adoración hacia la bellossom que sabía que tenía un nuevo juguete con el que divertirse.
Ella puso ambos pies en frente de tu cara y no tuvo que decir nada para que comenzaras a lamerlos, lamiste hacia arriba y abajo de su suela, sus talones y entre sus dedos de los pies mientras ella miraba cómo había dominado completamente a un humano que le serviría en todo lo que le placiera, mientras aceptabas tu destino y tú nueva vida en tu pantalón comenzó a crecer algo que demostraba lo feliz que estabas en esta posición, algo de lo que ella no se había dado cuenta... Aún...