Tenko feet tickling

Tenko despertó desorientada, "su" cuarto estaba más oscuro de lo normal, pero fue cuando se dio cuenta que no podía moverse que entendió que algo andaba mal.

Estaba en el cuarto de otro estudiante.

A pesar de que no podía ver muy bien lo que había en el cuarto, se distinguía fácilmente un gran estante, lleno de varias estatuillas de Monokuma.

Intentó mover sus brazos pero se encontraban atados fuertemente por algo, mientras que sus piernas estaban dentro de un extraño objeto con forma de caja.

Agotada por sus infructuosos intentos de liberarse, Tenko decidió reposar por un momento.

Mientras descansaba, intentaba recordar por que se encontraba en aquella habitación y por que estaba atada,
lo último que recordaba de ayer era haberse ido a dormir sin ningún problema.

Desesperada, gritó con todas sus fuerzas, esperando que alguien la encontrara y liberara lo más pronto posible.

Para su mala suerte, las habitaciones (tal y como Monokuma les había dicho) se encontraban insonorizadas, de modo que ni un solo hertz salió de la habitación.

¿Por qué estaba ahí?, ¿de quién era la habitación?, ¿qué hora era? y ¿estaba en peligro?

Mientras Tenko intentaba mantener la compostura del miedo que tenía, el dueño de la habitación entró rápidamente y la cerró con llave.

Una vez prendió la luz del cuarto pudo ver su cara con claridad.

Era Shuichi.

El detective se acercó a ella con rápidez sin decir ni una palabra, llevaba junto a él una bolsa que se veía bastante llena.

Tras un largo e incómodo silencio, Tenko rompió el hielo ferozmente.

"¡Tú, degenerate male!, más te vale explicar qué demonios hago acá" exclamó.

Shuichi suspiró profundamente.

"Esto no va a ser fácil. V-veras Tenko, he estado un p-poco interesado en ti y pensé que la mejor forma de e-expresarte mi amor era trayéndote hasta mi habitación a la f-fuerza".

Tenko se encontraba no sorprendida, sino lo siguiente, ¿cómo era posible que...?, simplemente, la revelación-confesión de Shuichi la había pillado desprevenida.

"Y-y no podía arriesgarme a dejarte aquí sin más, podrías reaccionar mal, así que aproveche de maniatarte con u-una cuerda y a-asegurar tus piernas con un cepo que encontré en el Almacén".

Cada palabra suya solo preocupaba a Tenko más y más, ¿cómo es posible que él pudiera haber hecho algo así?

"¡S-sabía que los hombres eran degenerados p-pero esto es demasiado, libérame a-ahora mismo" amenazó asustada.

"Ya es demasiado tarde, ya he avanzado mucho como p-para rendirme, s-solo me queda realizar la segunda parte del plan".

¿¡Segunda parte!?, esto no podía ser nada bueno...

"Dime Tenko... ¿Eres cosquillosa?" preguntó Shuichi.

Oh oh.

"¡C-claro que no!, ¿por qué lo sería?" respondió ruborizada.

"¿Estás segura?, ¿qué pasaría si intentara comprobarlo?"

Maldición, iba a hacerlo.

Ocupando todas sus fuerzas, Tenko pataleó tenazmente, pero al final resultó en vano.

Una vez agotada, Shuichi logro retirar las sandalias de Tenko con facilidad, quedando solo sus medias en sus pies.

Tras admirar e incluso oler un poco sus medias, Shuichi dejó a Tenko completamente descalza.

Mientras Shuichi se preparaba para atacar, Tenko intentó dialogar por una última vez.

"V-vamos Shuichi, no tienes porque hacerlo, solo suéltame y haré como si nada hubiera pasado".

Pero la única respuesta de Shuichi fue hacerle cosquillas en sus pies ocupando sus manos.

"¡Jajajajajajajajajajajajajajajajaja!" reía Tenko, mientras intentaba infructuosamente de alejar sus pies.

Shuichi entonces saco 2 plumas de la bolsa y empezó a hacer cosquillas con ellas a los pies de Tenko.

"¡Jajajajajajajajajajajajajajajajajajaja!" reía sin parar.

Pasó las plumas por los espacios entre sus dedos con celeridad.

"¡Jajajjajajajjajajajjajajajajjajajjannnooomásjajajajaja!".

Entonces Shuichi volvió a revisar su bolsa para sacar esta vez dos cepillos de pelo y una botella, la abrio y vertio su contenido sobre sus pies, para luego esparcirlo con sus manos, era aceite para bebé.

"Aaaaahhhhhh" gimió Tenko al ser masajeada.

"Coochie coochie coo~" dijo Shuichi mientras le hacia cosquillas con los cepillos.

"¡Jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja!". reía Tenko.

'Eso, ríe para mí" vociferó Shuichi, que se estaba volviendo más agresivo.

Tras sacar un pedazo de cuerda de su bolsa, ató los dedos pulgares de los pies de Tenko y retomó su cometido, pero con más fuerza.

"¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJANJAOJAOJAOJAJAJA!".

Con sus pies inmovilizados, las cosquillas de Shuichi se volvían más efectivas, y ella estaba desesperada porque se detuviera, como podían evidenciar su roja cara y su ruidosa risa.

"Ahora es momento de lavarlos".

Shuichi entonces saco una esponja y jabón, y echo el último sobre el primero.

"P-por favor Shuichi, ya estoy muy agot-tada, no lo h-hagas" imploró Tenko.

Shuichi ignoró sus súplicas otra vez y empezo a lavar sus pies con la esponja, dejándolos enteros de jabón.

"¡Jajajajajajajajajajaja!".

Y luego los limpió ocupando un trapo limpio de su bolsa.

"¡Jajajajajajajajajajajajajajajaja!".

"Excelente, tienes un minuto de descanso antes de que continuemos".

Si bien un minuto era muy poco, Tenko no se encontraba en posición para resistirse, y aceptó la tregua resignada.

...

"Listo, un minuto".

Shuichi sacó de la bolsa un tambor con miel y una cuchara y se acerco a los pies de Tenko.

Tras abrir el tambor, saco el contenido y lo esparció por los pies de Tenko ocupando la cuchara.

"¿¡Q-que estás planeando!?".

"Ya lo veras".

Una vez había puesto suficiente miel, dejo el tambor a un lado, se acerco y lamió la planta del pie derecho de Tenko.

"¡E-eh con la lengua no!".

Lamió ambas plantas para luego lamer el espacio entre sus dedos, finalmente cubrió los pulgares de Tenko con su boca y los succionó.

"¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!".

Tenko estaba al límite, la caliente lengua de Shuichi no paraba de acariciar sus sensibles dedos, finalmente no pudo más y se desmayó.